En noches como esta, tan claras y tan cálidas que podrían pasar por una sudorosa noche de verano, muchos jóvenes salen a pasear buscando algo de brisa que refresque los rostros y alegre los ánimos.
En concreto, una melosa pareja pasea junto a los canales de Ventormenta. El joven abraza a la chica por la cadera y, como quien no quiere la cosa, desliza la mano suavemente por la túnica, hacia el pecho, buscando un placentero contacto. A punto de llegar, el hombre se sorprende y detiene toda pícara actividad.
-Mira, Filomena… No es ese… ¿Cómo se llamaba? Ese famoso gnomo… sí, que inventó la movida esta de no sé qué viajes espacio-temporales. Héctor Hiperchufe o algo así, ¿no?
-Sí, cariño, pero ese no es, ¿no ves que está calvo? Y míralo qué desgraciado, parece que se va a poner a llorar en cualquier momento. Vámonos anda, que me está dando lástima… A un lugar más oscuro, si quieres, y terminas de buscar lo que andaban buscando esas perversas manos tuyas.
En la esquina que captó la atención de la primaveral pareja se haya sentado un pequeño gnomo junto a un pequeño robot azul. No es el famosísimo Héctor Hiperchufe, no. Es Alduvin, Alduvin a secas. Se cree ingeniero; ingeniero por vocación, pero lo que realmente es, es desgraciado de profesión.
-Tres, cuatro, y cinco… Cinco monedas de oro, con treinta y cuatro platas, con cinco cobres. Eso es todo, Matilde -dice Alduvin dirigiéndose al robot azul.
-¡Bip, bip! -responde Matilde, muy malhumorada.
-Sí, Matilde, ya se que no tenemos ni para pagarle al señor Joachim el alquiler, pero tranquila… el Hiperseñor Mecabrillante Alduvin Ultrachispa siempre tiene un plan.
-¿Bip, bop? - se pregunta el pequeño robot, temiéndose lo peor.
-¡Atracar un banco!
¡Vaya! Alduvin ha vuelto a sus andadas y, nada más y nada menos, quiere atracar un banco.
Así que se ha tirado un buen rato pegando carteles por los callejones más olorosos de toda Ventormenta buscando un grupete de desdichados mercenarios que vendan su espada a las cafrerías de Alduvin… Pero oye, mientras haya monedas de oro de por medio… ¿qué problema hay?
Off-rol:
Pues eso, busco gente que quiera hacer un rol casual, breve, en tono de humor, pero serio. Me gustaría gente independiente, más que nada porque es una pequeña chorrada para desarrollar a mi personaje, pero si alguna hermandad o grupo está interesada, bienvenida sea, por supuesto. En principio es solo para este minievento, pero el objetivo es hacer compañeros con los que poder seguir escribiendo estas pequeñas historias.
Para ponerse en contacto conmigo mandad una carta onrol a:
Alduvin-LosErrantes, o buscadme en el Ermitaño Taciturno.
También acepto que os anuncieis aquí y yo me pongo en contacto con los intersados.
¡Muchas gracias a todos!
Un saludo.