Para mi MS no influye en la ecuación para nada cuando hablamos de WoW, pq este camino empezó hace mucho, y el camino iba a ser el mismo.
Y la culpa en esto a diferencia de cuando se habla de diseño del juego si que es totalmente de los usuarios ya que Blizz puede hacer muchas cosas, pero no meterse en tu casa a pagar por ti.
Se habla mucho de otros tiempos y de que no volverán, que si antes la empresa la llevaba otro tipo de gente, y que nosotros éramos jóvenes y alocados… puede ser, aunque yo creo que como dijeron los padres de Diablo ellos siempre quisieron nuestro dinero, tal vez eran más morales en sus prácticas, pero dinero siempre quisieron.
El problema es que ahora hay mucho adulto que en realidad es un niño consentido, pq se consiente el mismo, y siempre que pasa algo de esto ¿que se lee? a gente que ya no es que compre lo que sale, si no a gente que dice LO QUE COMPRARIA aparte de lo que ya va a comprar y que ojala lo metan pronto.
¿Más monturas? “Adelante”, ¿qué me ponen transfis? “ojala”, ¿qué meten cosas que me permitan no jugar pero obtener cosas pq ahora no tengo tiempo pero si dinero? “menudo sueño”.
Y es que la satisfacción ya no es el juego, es consentir al niño interior, da igual que el juego se vaya a pique por el camino, como un cuarto que llenas de juguetes hasta que no entra ninguno más y más que un coleccionista pareces un tipo con diógenes en un sitio sucio… ya sabeis, como esa gente que coleccionaba Funkos.
A mi la verdad, que lo de la montura hasta me daría igual si no tuviéramos otras cosas como las subidas de nivel de media expa que incluso añaden repus y equipo, o la ficha, o lo que acaben metiendo en un futuro en este aspecto.
Pero para mi el problema es el dicho, ver lo que gente que ya no tiene tiempo, incluso ni ganas, de jugar a WoW esta dispuesta a pagar por contentar a su niño interior y seguir en algo que realmente ya no es para él.
Luego la gente se rie de Corea y sus mmos autoplays… chavales… literalmente el futuro solo teneis que escuchar atentamente a vuestro alrededor pq es el susurro que trae el viento.