A ver, como humano que lleva una temporada siendo orco, solo puedo decir que no puedo esperar a que sea día 2 para volver a mi hogar.
Es decir, ogrimmar es todo lo acogedor que puede ser un desierto desolador lleno de bárbaros con una higiene inexistente, lleno de granjas de cerdos.
Pero no es sólo eso. En el distrito de los trols, ni se os ocurra intentar refrescaros en uno de los charcos que hay. Ahí hacen sus necesidades. Y si no te encuentras popo de trol los goblin lanzan todo tipo de sustancias en el agua, te puede salir una urticaria o te puedes quedar calvo.
Otro problema que no te cuentan, es que está muy bien usar los colores de la horda, hasta que te encuentras un tauren bravo. Son muy majos pero cuando ven una capa roja se ciegan, casi me fui al otro barrio.
Creo que ya lo conté, pero si un vuplera os dice que vayáis con el que dejará que le toquéis la colita, no lo hagáis, es una trampa.
Los nochererna, por mucho que digan que han superado su adicción es mentira. Iba a ver unos amigos con una botella de vino de arco que tenía de mis aventuras por suramar como regalo, y me asaltaron a puñaladas para robarmela. Esque además la huelen desde lejos.
Los zandalari pasean por ahí como si fueran los reyes de todos, cubiertos de oro, si tanto oro tienen, ya podrían haberse lo gastado en comprar un ejército para que no asesinaran a su rey, son más ratas que los goblin.
Y los goblin, bueno, el que no te intenta estafar o robar, es un maniático de los explosivos. Es decir no has estado en la horda si nunca ha entrado un goblin en combustión espontánea a tu lado de forma aleatoria. Realmente es algo habitual.
Los no muertos tmb los pobrecillos, entre la putrefacción y el trauma de sylvanas tmb tiene lo suyo. Cada vez que saludo a mi colega costillas me contesta GLORIA PARA SYLVANAS. Lo hace sin querer el pobre, y se pone a llorar pq aún no lo ha superado.
No es por hurgar en la herida pero es como los fumadores, es decir, no lo hueles pq estás acostumbrado al humo, en este caso, el hedor, pero os aseguro que apesta. Se pega en la ropa y en el pelo.
Eso sí los elfos de sangre hacen una manicura que te cagas.