Para mí es una decisión difícil porque, por mucho que me cueste admitirlo, puede que haya desbancado a bfa como expansión más nefasta del juego. Bfa supuso la destrucción del lore de muchos personajes e incluso razas, además de tener un guión que canta a borracho desde lejos, y tiene el peor sistema de poder prestado del juego, con un rng capaz de dejar la repu de los archivistas de korthia en nada y con requisitos para ciertas bises grotescos, como, jugando pve, tener que subir ranking de arenas y un grindeo monstruoso a partir del .3 para las corrupciones. Sin embargo, bfa tuvo sus cosas buenas. Algunas zonas, las expediciones, buena parte de las bandas sonoras (alguna muy top), el leveo (al menos en la ali, en la horda es más cansino), y algún que otro personaje como bwonsamdi y sobretodo azshara, que mi principal pega con ella es su poco tiempo en escena.
Ahora la comparación con df. El lore no veo que se haya cargado nada (con una sonada excepción que mencionaré más alante), y sistemas de poder prestado no hay. Por desgracia, ahí se acaba todo. Si tuviera que resumir esta expansión en una sola frase diría que le falta esencia, espíritu, como se quiera llamarlo, pero no transmite, con un par de excepciones, véanse el final de la trama de amirdrassil (concretamente la parte del banquete) y especialmente la trama del vuelo azul con malygos y sindragosa (personaje que ha estado bien pero que al apenas tener papel se pasa por alto con relativa facilidad). En general da la sensación de que no ha pasado nada en la expansión, y nada más lejos de la realidad. Incluso hemos tenido un intento de destruir todo azeroth de un plumazo. Ni siquiera las bandas sonoras transmiten gran cosa, muchas de ellas.
Sobre lo de la casi destrucción de azeroth, vamos ahora a los villanos. Primero de todo aparto a vyranoth, que al final no fue tal. Iridikron tiene un pase, pero al final podría haber hecho más. Sin embargo, de entre todos ellos es el único que aprueba. Luego tenemos a fyrakk, que parece poco más que el típico esbirro brutote y descerebrado al que le guste quemar cosas, solo que casualmente descubre un modo de destruir el mundo y para allá que va. Boss final con sabor a sopa de agua. Raszageth sencillamente no es nadie a menos que te hagas un dracthyr (en cuyo caso te dan una o dos pinceladas) o te compres el libro de la guerra de los aspectos (cosa que no debería de ser necesaria, blizzard debería de saberlo después de admitir esa pifia con la historia de sylvanas y zovaal en sl). Sarkareth ya es el colmo, porque solo es alguien si te haces un dracthyr, e incluso así no pasa de boss de mazmorra ascendido a boss final de raid. Seguimos bajando y nos topamos con kurog, villano penoso cuyo papel se reduce a chafar una tarta, soltar a raszageth (cómo no, condición para ver esto último: hazte un dracthyr), dejar una frase al nivel del “nadie escapa de las fauces” de zovaal (“conoceréis el poder de los tauren”) y morir en la primera raid como boss intermedio sin aparecer antes una sola vez en la trama principal.
Después de los villanos principales… o algo así (ejem… sarkareth…), pasamos a los esbirros, y con esto seguimos bajando hasta el cero absoluto, que son los djaradin, raza tan sosa tan sosa tan sosa que hasta su banda sonora es sosa. Luego van los druidas de la llama, que francamente me pregunto cuántos elfos de la noche quedan a estas alturas después de sufrir un exterminio nivel arthas en lunargenta en su capital y de df. Y tras ellos, bajando todavía más, están los primalistas, que para mí solo son comparables con zovaal. Es decir, una secta salida de ninguna parte (a menos que se compre algún libro, en cuyo caso les sacan alguna excusa no muy buena para existir) consistente en civiles que en dos días han aprendido magia elemental potente, y encima con la proporción de representación de razas más ridícula de todas. Tenemos, según kurog, el susodicho poder de los tauren (sinceramente, qué les costaba una secta de tarasek u otros locales?), que… son elfos de la noche. Y no unos pocos, una cantidad absurda. Más absurda aún teniendo en cuenta que no quedaron muchos tras bfa (por mucho que se hayan inventado en un libro una colonia en krasarang con portal abierto a darnassus, cargándose en parte el dramatismo de la quema del árbol). Lo peor de todo es que, aún con todo podrían haberles dado un papel interesante, sobretodo con las pinceladas del .0. Podrían haber tenido algo similar a los abjurantes al menos, pero en vez de eso, se conformaron con una única trama al final de la expansión. Demasiado poco demasiado tarde.
Tema profesiones. No hay catch up, y requieren un farmeo monstruoso si quieres completarlas. Sencillamente las peores profesiones de la historia del wow.
Economía: la peor a años luz de cualquier otra expansión. Sencillamente nada da oro salvo que rushees o que seas el afortunado propietario de alguna receta muy poco común y de alta demanda, y la hayas maxeado debidamente. Tu única alternativa para conseguir algo de oro (pongamos, para pagarte la mensualidad en ah) si no cumples estos requisitos y no tienes modos de pasarte oro de un server a otro es subirte tropecientos alters, todos en el mismo server, y hacer religiosamente todas las wq que den oro, lleve las horas que lleve, que no serán pocas.
Sobre mazmorras y raids seré breve. De las mazs no se salva ni una, son todas aburridisimas y basadas en un daño disparatado, a menudo inevitable. Entre las raids, la primera es insufrible, sosa y basada en áreas y más áreas y daño inevitable, a veces con un sobreexceso de áreas para gozo de ciertos casters (raszageth). Las otras dos van mejorando, pero no hay nada memorable.
Los eventos, sí, hay muchos. Por desgracia se parecen tanto que al final se hacen muy redundantes, y algunos son inviables salvo que vayas en grupo, un problema muy grande de cara al futuro, cuando nadie haga ese contenido (que ya cuesta un poco encontrar gente para algunos).
El resumen de todo este tocho es lo que dije mucho más arriba. Df es una expansión que yo al menos, la siento sin esencia ni espíritu. Casi nada llena, casi nada transmite. Si tengo que compararla con la única otra candidata a peor expansión, mi dilema es el siguiente: bfa tiene el peor lore con diferencia debido a su guión macarronico fruto de los delirios revanchistas de un borracho. Df falla en todo lo demás.