He de admitir que sólo he visto las 2 pelis
Los cómics ya… pues no.
Eleanna llevaba dos días en Dalaran. Había aprovechado para visitar las tiendas buscando algún grimorio antiguo que pudiera servirle de ayuda ampliando sus conocimientos y su control de la magia arcana. Había ojeado unos cuantos tomos interesantes, los compró y los dejó a cargo del vendedor. Vendría a recogerlos cuando completara su misión…
Durante estos dos días había sentido varias inquietudes. Inseguridad, no estaba segura de lo que iba a hacer. ¿Por qué se preocupaba tanto por aquella sacerdotisa? ¿Se preocupaba la sacerdotisa por ella? No estaba segura… pero era una hermana kaldorei, tenía que ayudarla, tendría que deshacer la torticera maraña de pensamientos, palabras y falsedades que habría incrustado el sindorei en su cabeza, si no era tarde ya para eso…
¿Por qué no dejar que mi hermana la declarara traidora y decretara su búsqueda y captura? No, no es contra Menelwie contra hay quien ir. Sabía quien era el culpable de toda esta situación. Poco importaba ya si a Menelwie le importaba o no, lo que el sindorei había hecho con una sacerdotisa de Elune, era un atrevimiento, una abominación que solo lastraría más la ya frágil moral de mi pueblo.
“Sacerdotisas retozándose con el enemigo… por Elune, era lo último que nos faltaba”… pensó. ¿En quien iban a poder confiar?
Sumida en ese mar de dudas en discusiónes ciclicas que le habían ocupado la cabeza durante un par de días, se sentía además, obeservada. Y no solo porque 3 gnomos la siguieran a todas partes, “cuidaremos de nuestra salvadora hasta que la deuda de vida sea saldada” repetían casi al unísono… uff daban mucha grima, pero eran inofensivos… quien sabe, hasta podrían tener su utilidad. No, no eran ellos, la observaba algo, algo que no alcanzaba a descubrir…
Mientras caminaba distraída, un guardia bastante corpulento chocó con ella:
“A ver si aprendes a mirar por donde vas, elfa canija” - le grito malhumorado mientras la quitaba de enmedio y seguía andando.
“¿Me acaba de llamar elfa canija? Lo voy a transformar en cucaracha y lo voy a aplastar y luego…” Eleanna interrumpió sus pensamientos, el guarda le había deslizado una nota en el bolsillo.
Se separó un poco de la calle principal, entró en un callejón, y cuando se aseguró de que no había nadie la abrió. La nota rezaba:
“A media noche, donde la primera, V”.
“Vaya, así que Valeera ha vuelto ya… es hora de acabar con esto” Pensó la maga mientras incineraba la nota que tenía en su mano…
Espero que no sea una referencia a la peli que pienso.
Yo siempre que puedo meto referencias También depende de la peli en la que estés pensando, soy maga no adivina
Toy story 2. Los tres muñequitos aliens que rescata Mr. Potato.
Argent tomó la pluma,y escribió una escueta nota para su amigo Purple.
Tengo una buena noticia,y una mala.La buena es que he localizado la estatua que me pedías. La tengo perfectamente ubicada.
La mala querido amigo,es que los archivos y pergaminos consultados la sitúan en…
NAZJATAR
Enrollo la nota cuidadosamente,y convocó a Copernico,una prole de Fénix que había encontrado en el Castillo de la tempestad.
Ve y busca a Purple,y entregale la nota…
Amor…será Nazjatar? creo que el corrector mágico te la ha vuelto a jugar XD.
Se acercaba la hora de raid. Los días se le estaban haciendo eternos.Al menos esta noche sería su ultimo cierre en una buena cantidad de días,pero no contaba con escaquearse una tercera vez,y menos dado el día que era.
Paseaba por Ventormenta distraida mirando tiendas.Una llamó su atención especialmente.Lo que vio en el escaparate le recordó que pronto Argent estaría de cumpleaños.Entró dentro y le encargó algo muy especial al artesano.
No sabía si podría verlo ese día,pero se lo haría llegar de igual forma a través de Dawn,podría enviárselo a ella por correo con dos notas,una para ella pidiéndole el favor y dentro del regalo una especial para él.
Se sintió satisfecha con la elección.Sonrió amorosa pensando en el mientras por inercia acariciaba su anillo de compromiso.
De pronto lo vio,inclinado sobre un papiro,concentrado,levantó la mirada y perdiéndose en algún punto inconcreto lo vio sonreir y musitar.
-Te amo.
-Y yo a ti-pensó Menel.
Así que el anillo estaba encantado también.Era bueno saberlo,los días hasta que volvieran a verse no se le antojaron tan largos.
Siguió caminando y se cruzó con una maga kaldorei de pelo verde.Le recordó a Eleanna,no habían tenido tiempo para conocerse más,pero nunca olvidaría que le había salvado la vida en Costa Oscura.
Espero que esté bien-pensó la sacerdotisa-seguramente Ardeniel le reprendió por poner en peligro su misión.
Su locura en Costa Oscura había disgustado a muchas personas,y le había enseñado unas cuántas lecciones.
Esperaba verlas a ambas en el frente,esperaba que pudieran entenderla algún día.Les había cogido cariño a ambas,no solía encariñarse mucho con las personas,diez mil años de guerra le habían hecho perder a muchos amigos por el camino,procuraba estar sola cuando entraba en combate.Sin embargo desde que se habían enfrentado contra el señor Regente Lionheart y conoció a Argent había recuperado esa capacidad de encariñarse cuando alguien le caía bien.Era otra de las cosas que debía agradecerle a su amado.La había traído de vuelta del perpetuo estado de soledad en el que vivía.
Ojalá los demás pudieran verlos simplemente como lo que eran,sin mirar los colores que vestían-pensó con tristeza.
El mago permanecía concentrado en su mesa de encantamiento.Seguia trabajando en la estatuilla que Argent le había entregado hacia no mucho.
Una leve oscilación en el campo de líneas Ley que protegía su estudio,le informaba de que alguien había atravesado la barrera.Estaba tranquilo,sabía que si el visitante fuera hostil,habría caído fulminado al instante.
Un alegre chillido sonó,justo antes de que Copérnico se materializarse a su lado.Sonrió pensando en su amigo,tenía debilidad por aquella mascota.
Ofreciéndole una golosina de fuego al pequeño Fénix,recogió la nota que le enviaba Argent.La desdoblo con cuidado y leyó su contenido.
Vaya pensó contrariado,no sabe uno de sus posibles regalos de cumpleaños,se ha ido al garete.
Tendré que pensar en otra cosa,pero esa montura con forma de serpiente de mar,le habría encantado…
Y pensando en que regalar a su amigo para sorprenderle,volvió a centrar su atención en la mesa de trabajo…
Era cerca de la media noche. Eleanna se encontraba frente a la entrada de las alcantarillas mientras la admiraba pensativa… sentía un poco de miedo por lo que Valeera fuera a contarle. No había estado nunca segura de su misión… podía bajar y pagar a Valeera, y nunca pedirle la información. Volver con su hermana, con los suyos… ¿por qué estaba haciendo todo esto? … dejó la mente en blanco por un momento, y acto seguido entró decidida en las alcantarillas. Sus tres gnomos guardianes se quedaron en la puerta, les daba miedo entrar.
Eleanna sonrió recordándolos, al final le habían caido bien. Siguió avanzando por los oscuros mismos pasillos que hacía unos días, solo que esta vez se dirigía a un sitio diferente. Llegó a la misma amplia estancia donde estaban construidas las chabolas de madera, con todo tipo de negocios turbios en su interior.
Notó de nuevo la sensación de los mil y un ojos mirándola… con gesto decidido e ignorándolos, pasó por delante de la taberna donde había estado con Valeera solo unos días antes… no, esta vez Valeera la había convocado la taberna donde compitieron por primera vez.
Llegó casi al final del callejón donde había entrado. Al fondo, una luz y un gran jolgorio salían de una de las chabolas, esa taberna era su destino. Desconocía si quiera si tenía nombre… “y quien le importa” pensó para si misma.
Entró en la taberna, el triple de grande que la de hacía un par de días. Nadie la miró, todos siguieron bebiendo con indiferencia. Se acercó a la barra:
“Camarero, ponme una cerveza de la peor que tengas” - preguntó la maga.
“Normalmente me piden la mejor” - Dijo el camarero, un enano con cicatrices en toda la cara de mil y una batallas.
“Me la cobrarías mas cara, y seguiría siendo la mala” - Respondió Eleanna mirándole fijamente a los ojos.
“Todo depende de a quien sigas” - dijo el camarero acercándose un poco hacia ella.
“Mi lealtad, es cosa mía” - dijo Eleanna entre susurros.
El camarero expulsó el aire con mucha fuerza, y le hizo un gesto a la maga para que la siguiera. Ambos fueron a la trastienda, donde abrió una puerta que se encontraba escondida tras un pequeño armario.
Dentro estaba Valeera recostada en la silla y apoyando los piernas en la mesa, junto a un mago atracasol. No le conocía. Ambos jugaban a las cartas y bebían vino, esta vez sí, del bueno.
“Vaya vaya así que me eres leal, mi querida maga kaldorei” - dijo Valeera socarronamente.
“Solo hasta que mueras o encuentres a alguien mejor” - dijo Eleanna mientras se unía a la mesa. “Creo que no nos han presentado” - dijo Eleanna mirando al sindorei.
El atracasol comenzó a hablar a Valeera en Thalassiano pensando que Eleanna no lo entendería.
“¿Qué hace aquí una maga de la alianza?” - preguntó visiblemente enfadado.
“Cálmate, no viene representando a la alianza” - respondió Valeera con bastante condescendencia.
“Ya veremos, igual que algún día veremos a quien eres realmente leal tú”- dijo el mago lanzando una puya a Valeera.
Antes de que terminara la frase, valeera le había colocado una daga en la garganta. “Vuelve a hacer insinuaciones maliciosas sobre mi lealtad, y no será la maga de la alianza quien te preocupará. Mi lealtad es cosa mía, Baltron”.
“Claro, claro” - dijo el mago con bastante tranquilidad, parecía bastante acostumbrado a esa situación.
Eleanna miraba mientras intentaba poner cara de ignorancia, como si no hubiera entendido nada. “Bueno Eleanna, disculpa esta pequeña discusión” dijo Valeera volviendo a su juego de cartas.
“No te preocupes”, dijo Eleanna sirviéndose un poco de vino. “¿Lo tienes?”
“Por favor, por quien me has tomado. Claro que lo tengo”. Valeera sacó un sobre de su bolsillo, y se lo lanzó a Eleanna.
Eleanna lo cazó al vuelo. Miró el sobre con detenimiento… volvió a dudar. Pensó en su hermana, “debería volver con ella, no mires lo que hay dentro de este sobre.” Valeera se percató de que no lo abría.
“Prefieres que te lo diga?” - Preguntó mientras no levantaba la vista de su mano de cartas.
Aquelló pinchó en el alma a Eleanna, que abrió el sobre, sacó el trozo de papel que contenía, y lo leyó…
La maga rebufó con resignación, “pues claro, donde iba a estar si no” pensó.
“Estás segura Val?” - preguntó Eleanna,
“Al 100% querida. Fué bastante fácil, he de añadir, es un tipo… aburrido y no se mueve mucho…” - respondió Valeera con cierta resignación. Parecía que le molestara que encontrarle no huubiera sido un reto.
Eleanna se encontraba en un callejón sin salida. Valeera había localizado a Argentsword en Lunargenta… su misión se acababa de complicar, por no decir que era imposible. Quizá fueran los designios de la diosa. Quizá Elune le había mandado esta señal para que desistiera de su loca empresa…
“Si me hubieras pedido que lo matara, ya estaría muerto, y nadie se habría enterado. Pero amiga mía, como solo querías saber donde está… ya lo tienes. Me has regalado el dinero querida” - dijo Valeera socarronamente.
Eleanna no contestaba, estaba mirándo fijamente el nombre escrito en el papel.
“Lunargenta”, “Lunargenta”, “Lunargenta”.
“Valeera, ¿tienes algún escondite en Lunargenta?” - Preguntó Eleanna sin levantar la vista del trozo de papel.
Aquella pregunta pilló desprevenida a la pícara sindorei, tanto que se resbaló y cayó de espaldas. Se levantó a un ritmo endiablado, y dando un fuerte golpe sobre la mesa le dijo muy seria a Eleanna.
“Ele, no vas a ir a Lunargenta, estás loca” - Le gritó.
“Si voy a ir Val, y tu vas a ayudarme” - dijo Eleanna levantando la mirada hacia Valeera.
Valeera se sobrecogió, durante un instante le pareció que la maga no tenía ojos…
Tras una ducha y con el uniforme de raid puesto,Menelwie se dirigía a cumplir su obligación,abrió la mochila para coger las llaves de su taquilla y vio un objeto que había olvidado tener,uno muy especial que su madre le había traído en su visita a Cuna del Invierno.
De pronto una idea se le pasó por la cabeza.Llamó a su hipogrifo de Teldrassil y montando en él con rapidez se dirigió al distrito de los enanos,a la tienda que había visitado con anterioridad.
Entró como una exhalación y dirigiendose al artesano con el objeto en la mano le dijo:
-Maese,podríais utilizar esto para el encargo que os he hecho?Aunque sea para una pieza pequeña.
El enano cogió lo que la sacerdotisa le entregaba y lo estudió con atención.
-Es lo que creo que es?-preguntó alzando una ceja.
-Si,una de las ultimas ramas de Teldrassil-dijo Menelwie con una sonrisa triste.
-Y estais segura de sacrificarla para esto?
-Lo estoy-dijo convencida.
Tras volver a examinarla el enano la miró y le dijo:
-Creo que para la b…
-Shhh las paredes tienen ojos-dijo la sacerdotisa-sólo hacedlo
-No será barato-dijo el enano mirando a su alrededor confundido por la advertencia de la kaldorei
-No importa el precio.
-Así se hará,aunque no la necesitaré toda,quereis el resto?
-Por favor…suplicó Menelwie-aunque apenas quede un centímetro,me gustaría conservar lo que os sobre.Muchas gracias.
Se despidió del enano y llamó a su montura de vuelta.Iba a llegar muy justa a la raid,pero había merecido la pena la idea.
Seguramente muchos no entenderían lo que acababa de hacer. A Ardeniel podrían darle los siete males.Pero pensó que no habría regalo mejor,ni más personal,ni con más sentimiento que el que iba a hacerle a Argent.
Esta historia parece hecha para que me de una úlcera.
Edito: es que no voy a encontrar ni un solo aliado?
Hazte inmune, como yo xD
Eres “el malo” ¡ese siempre está solo!
Eleanna querida en batalla seré tu sombra,me has salvado la vida y eso no lo olvido,pero no me pidas que renuncie a ser feliz que he tardado 10000 años en conseguirlo.
PD: creo que volveré donde el artesano y con lo que le sobre que me talle un colgante con forma de corazón por pequeño que sea,por Teldrassil!!!Pero ya será mañana que Therazane me va a crujir XD
Sed buenos…XD
Que no llegooooo
Eres sacerdotisa. Tus intereses no deberían prevalecer sobre los de tu pueblo. ¿Es que se te ha olvidado todo lo aprendido en el templo?
Y regalarle un trozo de rama de Teldrassil a un sindorei… es el mayor insulto que nos puedes hacer. Nos estás escupiendo en la cara directamente. Pero yo voy a acabar con esto.
Edito: es que cuanto más lo pienso más me enciende. ¡A un horda! ¡El árbol que ellos mismos quemaron! Que barbaridad.
P.D que vaya bien la RAID
Argent se encontraba trabajando en la sede del relicario,en el intercambio real de Lunargenta…
Un joven aprendiz se dirigió hasta el deteniendose al lado,mientras observaba el trabajo que estaba realizando el paladín en silencio.
Argent se percató de su presencia y le dijo:
-¿Querías algo,muchacho?
El muchacho tartamudeó un poco mientras asentía con la cabeza.
- Se señor,me ordenaron que os entregara esto.
Y alargando la mano le tendió una misiva lacrada.
Argent observó en silencio las iniciales que destacaban en el sello. T.M.
En silencio el paladín rompió el sello,y leyó el contenido de la misma.Se quedó pensativo un momento…con la guerra que parecía reavivarse,no parecía el mejor momento,sin embargo algo así era imposible de rechazar,y menos a él.
Entregó 10 monedas de oro al muchacho que lo miraba asombrado.
-Esto es para que continúes con tus estudios,muchacho.Dijo mientras le acariciaba la cabeza con cariño.Decidle que partiré de inmediato.
Argent se dirigió a sus aposentos, recogió los útiles necesarios,y saliendo a la plaza llamó a su Fénix.Arrebujándose con la capa,se elevó hacia el firmamento.Y tras orientarse,dio la orden de partida a su montura…
Como huye el paladín empalagoso. ASí no hay manera de hacer avanzar esto… solo avanza para darme disgustos.
Tras dos días siguiendo a la maga al fin parecía que iba a descubrir algo. Tres gnomos la seguían y parecía que habían decidido colocarse de porteros en el acceso a los bajos fondos. La cazadora de demonios simplemente continuó avanzando hasta que se apartaron de su camino. Siguió a una distancia prudencial a Elanna, ocultando su cara. Durante la lucha contra la Legion había pasado muchos días en aquellos lugares y había dejado algunas deudas y muchos corazones rotos. No quería que nadie la pudiera delatar.
Entró en una taberna clandestina, curiosamente a la última que Eilyria desearía entrar. La última vez que estuvo allí dejó una generosa cuenta sin pagar. No obstante, no permitiría que su presa se escapara. Se quedó en una mesa cerca de la puerta mientras observaba como el enano acompañaba a Eleanna hacía la estancia secreta donde solían preparar una timba todos los miércoles. “Hoy es martes, una pena” pensó Eilyria. No podía acercarse más sin ser descubierta, así que usó su visión espectral para ver lo que acontecía en la habitación secreta. Detectó tres cuerpos, el de Elanna que se encontraba de pie y dos figuras sentadas, un varón y una hembra. Ambos elfos de sangre por su tamaño. Vio como le entregaron un sobre a la maga. ¿Qué pondría en él? No le interesaba, sólo quería saber hacia donde iría la maga ahora. Mientras ella estuviera controlada, la boda no correría peligro. “Argent es un viejo que sabe cuidarse solo, no necesita mi protección, pero esta maga planea algo y quiero saber que es” pensó mientras abandonaba el local.
Frustrante, ¿verdad?
Digamos que es “¡Que asco da el amor cuando es de otros!” xD
Vengaaa, no vaya a soltar diablillos la Therazane y la líe, no la enfades Que te sea leve.
Relájate, querido. A ver si te crees que a toda la horda le ha parecido bien esto. Quién dio la orden fue la psicópata no-muerta, y he de decir, que no participé siquiera en aquella batalla. Me da lo mismo lo que esa loca del toto me diga. Ese odio lo llevas muy mal ¿eh?
¿Quieres una tila? =/ si quieres matar, date un paseo por costa oscura, o por bosque de los argénteos y mata unos pocos renegados, o vete a Argus, que siempre hay demonios esperando a ser masacrados.
Oye, oye, paparazzi de los (censurado), que los renegados son camaradas nuestros. No me obligues a incluirte en mi “lista de defenestraciones programadas para 2020”.