En teoría los que he traído yo son más, pero tienen su propio OPmétodo para venir (lo he narrado antes). Lo único que tendría que hacer es decirles como están las cosas y si aceptan venir o no (hay varios hordas, y no sólo sin’dorei).
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Un apunte: No hay que ir de tres en tres, sino repartirnos en tres oleadas separadas por un minuto de recarga. Tres minutos en total.
Ok,entonces lo corrijo…
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El primer grupo sube una vez M. A. D. R. E anuncian con su robótica voz que la plataforma está lista.
Mathân, Aiden y Rhophy son los primeros en subir y con un flashzo aparecen los 3 en Villadorada
Allí los 3 observan como un grupo de la séptima Legión, un brujo y un guerrero rodeaban el centro de la villa
a lo que Mathân sin previo aviso se oculta en la sombras para poder observar y atacar si es necesario,el humano y el enano se acercan al cerco, donde observan la lucha entre Athor y el brujo
-No deberían estar aquí, vayan a la taberna y no salgan si no quieren morir… Un momento, ¿aventureros?, es un poco difícil de explicar, pero necesitamos vuestro servicio con ese brujo, es un servicio para la Alianza que deben cumplir. Dijo uno de los soldados de la séptima legion
-Bien, por que venimos a matar a ese brujo de todas formas, con vosotros o sin vosotros dijo fríamente Aiden
-Es también una larga historia, venimos a matarlo, así que cuenten conmigo confirmo el enano
Rhophy piso algo blando y viscoso… El cadáver de un picaro de la Legión reventado, a lo que se le desdibujo en su cara una arcada, tras ello se agacho para realizar un sencillo ritual para guiar su alma al más alla
-Que Descanse en paz,y perdón por pisarle.
-Aparecerán refuerzos en unos minutos, son elfos de sangre, pero nos apoyarán en esta batalla, así que ni se les ocurran tocarlos, si es que no queréis acabar como vuestro amigo Dijo Aiden señalando al picaro muerto al que el enano le daba su sepelio
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El cazador sopesó el plan de su compatriota sin’dorei. Le gustaba la idea de atraer al brujo a un lugar poco concurrido como Karazan, y sobretodo más alejado de Ventormenta que Villadorada, pero por otra parte era también muy arriesgado. Si las cosas salían mal todo Azeroth podría estar en peligro.
A Menelwie no pareció convencerle. Obviamente, pues eran sus hijos. La sacerdotisa sin’dorei propuso separarse, cosa que era preferible a poner un pie en Ventormenta (al menos sin llevar el disfraz adecuado), pero de nuevo tenía su lado negativo… no podían dividir fuerzas.
“Espero que Vangelys tenga buenos disfraces… no me gusta la idea de pelear en territorio de la Alianza, aún con ésta seguramente breve tregua” pensaba el sin’dorei mientras los demás seguían hablando.
El cabello de la Muerte humano aseguró que no corrían peligro ahí, pero aunque ese fuera el caso, si llegaban no noticias a Orgrimmar de que habían estado luchando por la Alianza, podrían ser acusados de traición. Las facciones nunca le habían importado realmente, pero eso no significaba que pudiera darse tales libertades.
Parecía ya todo decidido, así que el cazador se alejó un poco y abrió el dispositivo de comunicación con el mago, el cual atendió enseguida.
– ¿Ocurre algo? -preguntó una calavera llameante- ¿Ha fallado el agujero de gusano?
– No querido- la calavera pareció arder más- a ver si te quitas ese horrible casco de una vez… te llamaba porque ya han trazado un plan…
– No te preocupes por los disfraces- le tranquilizó el mago- para ojos indiscretos seremos razas de la Alianza… aunque tendría que lanzar el hechizo también sobre los hordas que están ahí. A Zel y los demás se lo puedo poner ya.
– No te esfuerces demasiado, necesitas reservar energías para la batalla.
– No es tan complicado- le restó importancia la calavera en llamas- estamos preparados. Ve hacia allá y activa el agujero de gusano.
Con esto cerró la comunicación y el cazador llegó justo para pasar junto a la pareja y otro sin’dorei mago.
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Menel cruzó el portal con Argent,Purple y Hae.Lo que encontró al otro lado solo podía describirse como el apocalipsis.
Decenas de cadáveres de soldados de la Septima Legión descuartizados.
Solo un militar de alto rango parecía soportar y con dificultad los ataques del brujo.
Se puso a la defensiva a la espalda del brujo que parecía increpar al humano de Ventormenta.Miró a Argent y purple.Buscó al resto con la vista esperando las órdenes de Aiden.
Aquello no iba a ser fácil,sentía escalofrios en la piel al sentir el inmenso poder del brujo.
Aiden con un gesto de la mano les ordenó ponerse en semicírculo alrededor del brujo excepto a los paladines y el mismo que se encargarían de la protección de Belter.Al final…ellos mismos serían los cebos para que la sindorei usase la gema para atraparlo.
El brujo debió de notar el poder,pues dejó de insultar al humano y se giró lentamente hacia ellos.Menel tragó saliva mientras conjuraba un escudo entre susurros y entraba en forma de las sombras.
Por primera vez…tuvo miedo.No recordaba esa sensación.Y se alegró de haberse negado al plan de Felix.
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Athor no sabía cuando había caido el último de sus hombres. Todo su ser se había centrado el su terrible oponente, que parecía ser cada vez más fuerte y oscuro.
Ruina bloqueó un garrazo monstruoso, y el guerrero notó como la vibración sacudía sus brazos. A pesar de que la hoja, envuelta en llamas titánicas, había perforado la vil carne del brujo varias veces, este no parecía ni inmutarse. Las mil almas que encerraba su cuerpo le habían otorgado una suerte de inmortalidad basada en una atroz regeneración.
—¿Cansado, guerrero? Yo puedo otorgarte el descanso que mereces.
Con una rápida maniobra de espada Athor desvió las garras y empaló por tercera vez a Mantovil en las tripas.
—Clavaré tu cabeza en una pica y la exhibiré por las calles de Ventormenta antes de que caiga el sol.
El brujo desapareció con un estallido. Athor sintió su poder vil arremolinándose tras su espalda y se dió la vuelta, justo a tiempo para parar el proyectil de sombras con su hoja, aunque no impidió que la explosión le lanzara por los aires contra la taberna.
—Nuestro baile termina aquí, General —dijo Mirthus con tono burlón mientras extendía una mano hacia él—. Me aseguraré de exihibir tu cabeza por las calles de la que será mi ciudad antes de que caiga el sol.
Su palma se llenó de poder vil, preparado para segar una nueva vida, cuando de pronto un siseo arcano dio paso al silencio. ¿Podría ser? ¿Podría ser que aquello que tanto tiempo le había eludido hubiera aparecido ante él sin más?
—Ver para creer…
—¿Hojagélida? —Athor tosió sangre y luego escupió—. ¿Era esto en lo que estabas metido? Más te vale que esto te valga para saldar mi deuda, o te cortaré la cabeza aqui mismo.
—Primero cúrate. Después ya veremos que cabeza acaba separada de sus hombros —respondió Aiden haciendo un gesto a Belter para que le hiciera un apaño.
El General se puso en pie rezungando.
—Mientras sea la de ese hideputa de Mantovil me daré con un canto en los dientes. Pero espero que tengas un plan, este ser es inmortal.
Aiden dio un par de pasos hacia el brujo. Su poder era abrumador como poco, casi doloroso de sentir. Tenía que admitirlo, estaba algo preocupado, pero no dejó que ni una gota de esa preocupación se filtrara en su rostro.
—Mantovil, por tus innumerables crímenes contra Azeroth, y por la potestad que me da su Portavoz, te condeno a muerte. Ríndete y te daremos un final misericordioso.
El brujo se llevo una mano al mentón mientras fingía pensar.
—Mmm… Una oferta tentadora, pero creo que voy a pasar de ella. Espero no haberte decepcionado, Campeón de Azeroth.
Con un último siseo arcano, lo que quedaba del grupo apareció a su espalda.
—Al contrario. Es justo lo que quería oir.
Sus hojarrunas se congelaron, preparadas para alimentarse.
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Cuando aparecieron en Villadorada,el paladín observó una escena dantesca…
Decenas de cadáveres,alfombraban el camino hasta un brujo. Argent notó como Menel se ponía tensa y entraba en su forma de sombras…
Un escalofrío recorrió su espalda,aquel brujo casi igualaba en poder a Gul’dan,y recordaba cuanto le costó abatirlo.
Observó como un humano le hacía frente,y oyó las palabras del caballero Aiden conminándolo a rendirse…
El brujo hizo acúmulo de poder en respuesta, y Argent sintió como la tapa de un ataúd se cernía sobre ellos…
Vió brillar las hojarunas del caballero, y encomendándose a la luz,se preparó para el combate. Tal y como estaban posicionados,y curtido en mil combates,asumió que tanto Félix como él actuarian de off tanques,llevando el humano y el caballero el peso del combate…
Un apretón sobre la mano de su amada,a modo de consuelo y para infundir confianza fué su despedida momentánea…o tal vez definitiva.
Su gesto se endureció, y su tenacidad cobró fuerzas,este iba a ser un combate memorable…
Aferró su escudo,y comprobando el filo de su espada, ocupó su lugar
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segundos antes de la llegada del resto de grupo
El brujo observo a los recién llegados
Asi que tenemos visita… Un caballero de la muerte, un paladin y un picaro, y parecen poderosos, cuando acabe con esta molestia y sus secuaces vuestras almas seran mi nueva incorporación , pero antes…
con un fugaz movimiento el brujo líquido a todos y cada uno de los soldados de apoyo de la séptima Legión, en segundos el pueblo estaba salpicado de cadáveres desmembrados
-Bueno, mucho mejor ahora, ahora si me disculpais es hora de acabar contigo, Athor.
En el presente
Una gran presión rodeaba la zona, el enano podía notar que ese brujo era la fuente de todos los problemas, que era el que líquido a todos los demonios de la fortaleza, metió su mano en su mochila y dejó los 3 frascos en la parte más alta de los enseres, a mano por si fuese necesario
-Es la hora… Reclamare mi recompensa de tu cadáver, demonio.
Con la orden de Aiden se preparo para la gran batalla, quien vivía y quien moría se decidía en ese momento, se podría decir que eran muertos vivientes en ese momento
Uso bendición de reyes sobre Aiden, mientras observaba con un poco de temor el imponente aura del brujo
-Si vivo me pegaré la fiesta padre, si muero será reventando a esta escoria. dijo el enano antes de empezar el ataque
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La mañana se levanto calmada. Belt despertó a Morda y gracias a ello, pudo desayunar con su amiga antes de que la tormenta comenzara.
Con curiosidad e interés, observó como Aiden entregó a Belt la gema, dentro de una funda de aspecto colosal, semejante a una calavera, indicando a su amiga como debía usarla, como sostenerla y como apuntar con ella. y aun mas importante, practicando un poco con algunos desdichados elementales, antes de la batalla.
Con cada nueva prueba, veía como el rostro de Belt se llenaba de convicción ante la misión que debían desempeñar. Es una gran persona esta elfa, quien lo diria dado nuestra presentación, pero colosal tras conocerla…
La reunión fue interesante. Aiden, completamente convencido de su plan, calmó ánimos y organizó lo que sería una batalla épica y colosal. La gnoma, feliz y altanera, leía con claridad en el rostro del Dk, cierto atisbo de preocupación. Lo cual le gustó a la gnoma, el realismo es importante. Aunque entendía que el pesimismo era negativo.
llegó el momento de atravesar el portal. Una ligera mirada al grupo y FLUPPP!! ambas emergieron en villa dorada.
– Mas bien villa Oscura!! diablos menuda carnicería!!.
– Céntrate Morda! – Cortó Belt – Ataquemos!
– Espera, seamos inteligentes. Aprovechemos que Aiden parlotea con ese energúmeno, para situarnos correctamente a su alrededor, el demonio será mas fácil de vencer si lo rodeamos. Recuerda esperar a la señal de thanos para usar la gema. No te pongas nerviosa!!. Vamos por su espalda y guarda las distancias!!
– Vamos! – Increpó Belt
Dieron un giro y se situaron detrás del demonio, preparadas.
– Deja que los meles lo sostengan cuerpo a cuerpo antes de actuar… Hay que esperar el momento justo. – Dijo Belt a Morda.
Esta le guiño un ojo.
Gaedriel
Gaedriel y Kmils salían en montura de Ventor en montura voladora, cuando algo llamo su atención. La primera en verlo fue la pequeña goblinesa.
– Que es eso?? Ahí abajo pasa algo.
La regia elfa miró con desdén y decidió acercarse, después de todo eran espías. Ambas redirigieron su ruta y al acercarse vieron al General luchando con el Brujo de antes, entre una multitud de cadáveres.
– Parece que el fornido General, esta vez, tiene aliados…
En ese momento, emergieron Morda y Belt de un portal y corrieron entre los cadáveres. Ambas, con cara de estupefacción se miraron mutuamente.
Off-Roll.: Ale te toca. Tras tu movimiento añadiré mas, tienes libertad total.
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Mimimimimi
Pos bien chulo que me habia quedao 
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Belter esperaba ansiosa a las espalda del brujo la señal. La situacion era peligrosa, muchos muertos y pocas defensas. Esperaba que todos estuvieran preparados, solo quedaba un grupo por llegar y habia alguien mal herido. Aiden le dio una señal para curarle.
Belter con un rapido movimiento le tiro un escudo una cura rapida, el brujo estaba distraido con ellos y no se percato. Seguia alerta esperando la señal para atacar al brujo y lo que quedaba del grupo aparecio. Se agruparon con ellas.
Con un varios gestos se organizaron, el grupo se fue hacia alante formando un semicirculo, dejando atras a Belter protegida para el comienzo del ritual. Belter vio el momento de comenzar con los preparativos para la señal de Thantos. En cuanto la diera solo tendria que dar el paso final. Cerro los ojos y creo que un triangulo al rededor suya con el poder de la gema. Una vez formado creo otro tirangulo inverso, grabando en el suelo una perfecta estrella que se iba poniendo dorada. Sintio el peso del poder la gema en sus manos y como latia desde dentro. Habia practicado sin necesidad de hacer la runa, pero esto la pontenciaria y castearia el hechizo con mas celeridad, eso le habia dicho el caballero mientras practicaba, que seria de gran ayuda ya que seguramente tendria que drenar al brujo varias veces. El poder recorrio todo su cuerpo, sintia como la energia que estaba desatando la elevaba del suelo.
Estaba todo preparado, parecia ir todo bien, aunque estaba ajena a todo lo que sucedia al rededor, el trance la tenia completamente concentrada. Abrio los ojos y en el fragor de la batalla vio al caballero dando la señal. Con un grito canalizo el poder de la gema directa al brujo, un rayo que le atraveso el cuerpo. Belter sentia como se iba debilitando. Todos como si de una coreografia se tratara atacaban al brujo.
OFROLL: he dejado un parte donde yo no se que pasa para que desarrolléis los acontecimientos mientras yo estaba preparándome.
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Dejaremos que Aiden lleve el ritmo del combate,los paladines haremos nuestro trabajo,Menel generalmente en sombras es la que me cura a mi. Supongo que Lonvar irá a saco,Purple a distancia,y Mathân con los adds,si se presentan…
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Nada más cruzar el portal notó el enorme poder vil que desprendía el brujo. Era tan abrumador que tardó unos instantes en darse cuenta del desolador panorama en el que se encontraban. Aquello era como revivir lo de Costa Abrupta…
Sin perder tiempo, activó el agujero de gusano portátil. De inmediato éste se abrió y dejó salir, a la altura del suelo, un portal arcano de unos 2 metros de diámetro:
Una réplica exacta salió entonces arriba, como si fuera un espejo, y aparecieron Valhkyr, Ember y Lor’thoren, que aún sorprendidos por la escena, se pusieron en sus posiciones. A los pocos segundos aparecieron aparentemente ya “disfrazados”, Do’urden, Vangelys y Arnath e hicieron lo mismo. Eliannor iba con ellos, aunque al ser híbrido no le hacía falta el disfraz. El portal de arriba se cerró e instantes después el de abajo. El cazador lo recogió y lo guardó.
Vangelys repartía sus hechizos de camuflaje a todo miembro de la Horda que lo necesitara, antes de centrar su atención en el brujo. Vahlkyr por su parte había ido a ayudar al humano guerrero, portando por su puesto su inseparable escudo.
Vio también a Arnath, lanzando curas, y a la sacerdotisa sin’dorei haciendo lo que parecía ser un ritual. Estaban ya todos… probablemente la “raid” más mixta que se había hecho nunca. Blackie rugió con fiereza hacia el brujo, y justo en ese momento apareció Engañifo, hecho una bola de fuego vil.
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Esto lo escribo como el dk,porque no me deja…
No sabía que demonios hacía alli,Rocal como todos los sitios selváticos, no le gustaba. En ellos infinidad de depredadores rondaban buscando sus presas…
Cuando vió desaparecer al grupo,sintió una especie de vacío en su interior. Por unos instantes,habia sentido como que pertenecía al mismo. Una extraña inquietud lo había invadido,y sin un rumbo fijo,había acabado en aquel infecto lugar,tras atravesar el portal hacia las tierras devastadas.
Invocó de nuevo a su montura voladora,y ganando altura(había mucho terreno colindante bajo el estandarte de la alianza),dejó que su montura volara a su aire.
Mientras su mente era un hervidero de ideas. Creía que en aquel momento,el pícaro estaría también planteándose un montón de interrogantes, que tan sólo el podia responder…
No sabia si era el momento adecuado para presentarse a su hermano. Habia observado,como,sin tener en cuenta su origen,parecía aceptar de buen grado su compañía. Incluso un alzado humano como él,formaba parte del mismo, y por momentos parecía dirigir al grupo. No obstante,no era lo mismo,aquel humano era un extraño,y él,su hermano…
Volaba perdido en sus pensamientos, cuando el hedor a muerte, que también conocía atravesó sus fosas nasales. Detuvo a su montura en el aire,y extrajo el catalejo de su mochila. Enfocando hacia el suelo, pudo ver decenas de cadáveres, alrededor de una figura imponente, de la que parecia emanar un gran poder…
Pudo ver alrededor figuras,que parecían rodearlo. Descendió un poco para ganar nitidez en la imagen…
Un brillo verde y dorado llamó su atención,descendió un poco más,y la visión que obtuvo,le golpeó como un mazazo. Allí estaba su hermano,junto al hetereogéneo grupo,dispuesto a enfrentarse al ser que parecia un brujo…
Su autoimpuesto deber,de proteger a su hermano,ganó la batalla sobre su razón. Tal vez no había sido “formalmente invitado” pero podía soslayar aquel hecho.
Buscó en los alrededores un lugar discreto para descender. Cuando tocó el suelo,pudo ver que no muy lejos,una sacerdotisa Sin’dorei,compartía lugar con su homónima gnoma…con un paso espectral adelantó su posición,confiando en no ser visto hasta que se entablase el combate. Antaño,cuando fué paladín,siempre tuvo respeto y admiración,por aquellos, que guarnecidos sólo con tela,se enfrentaban a los combates con valentía…
Su hermano parecia resguardar a su amada sacerdotisa,y el se dispuso a hacer lo mismo con aquellas desconocidas
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Observa los refuerzos, ve a algunos elfos de la noche recién llegados, a la vez ve a un elfo de la sangre dk, muy parecido a argent, incluso se podría decir que son hermanos o gemelos, a saber
Belter empleo su gema debilitandola, pero alcanzando al brujo de lleno
-Esta…¿Muerto? Dijo el enano viendo la humaleda formada por el impacto de tal energía con el brujo, mientras se dio la vuelta medio segundo para ver a Belter
-! Cuidado enano! ese grito instantáneo de Mordâcae le salvo la vida, pues el brujo ataco en una fracción de segundo, tiempo justo para que Rhophy bloquease el ataque con su maza , lo que le hizo saltar y retroceder unos pocos metros
-gra…gracias morda, ha faltado un pelo, estoy bien, solo son unos arañazos.
unas escamas de su armadura saltaron por los aires debido a las garras del brujo, el enano pudo notar un ligero escozor, un ataque menor pudo atravesar su armadura y llegar a su piel como si fuese mantequilla, entonces, ¿como pudo aguantar tanto aquel humano?
-Bueno, tras este juego vamos a ponernos en serio, tengo planes que cumplir y vosotros, insectos, me lo estáis retrasando.
El brujo empezó a cubrirse de una bruma verde vil originada en su cuerpo
-Ahora vais a ver que son 1000 almas de demonios almacenadas en mi cuerpo.
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Menel tiró varios escudos ya en forma de las sombras. Rhop,Felix,Aiden y Argent atacaban a melé.Desde el ángulo contrario el grupo de Hae hacía lo mismo.Se concentró un momento para hacerle frente al miedo.Y empezó a soltar hechizos de sombras que no parecían hacer mucha mella en el brujo.
-Por Elune !!-se dijo-que clase de brujo es este?
Recordó los cientos de cadáveres de demonios en Terrallende y lo entendió.Norda ayudaba a Belter y pudo ver como su prima trazaba una dorada runa y atacaba al brujo con la gema.
No entendió mucho,algo se había perdido en su “paseo” por Silithus pero confiaba en Belter.
Viendo que no podía hacer mucho en forma de las sombras tomó una decisión…odiaba usar sus poderes curativos pero serían de mejor ayuda.
Dejó de levitar mientras Belter canalizaba un rayo con la gema y tras concentrarse se dejó llenar por la luz de Elune y se dispuso en modo defensivo a curar a los emás cuando fuese necesario.
Vio al enano salir despedido y fue para él su primera cura.
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off hoy poco voy a poder escribir así que quien necesite una cura de esta sacerdotisa que lo escriba sin miedo.
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Voy a meter a la picara de belter y mi elfa brutota en la lucha.
Lo haré tras la próxima intervención de thantos, que calculo que describirá alguna parte del combate, por lo que tenedlo en cuenta.
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Mantovil alzó el puño y se vio rodeado de un tornado de almas viles, que gritaban de dolor mientras su maestro les daba forma. Una docena de demonios, translucidos y verdes como una vidriera, se materializaron ante el brujo. Sus cuerpos estaban devastados, sus mandíbulas descarnadas y sus miradas llenas de miedo y dolor, pero no dudaron en lanzarse contra los guardaespaldas de Belter.
El sonido del acero silbó por el aire, y dos de los demonios cayeron hechos pedazos bajo las armas de Mathân, que acaba de aparecer de las sombras.
—¡Yo protegeré a Belter! ¡Encargaos de él antes de que invoque a más de estas cosas!
Todos los melees corrieron hacia él, preparando sus armas para golpear. Mirthus alzó las manos y descargó andanada tras andanada de fuego vil, pero todos los proyectiles fueron esquivados o bloqueados.
Alzó un muro de llamas a su alrededor, como un remolino de fuego impenetrable, y los señaló con desdén.
—Quedaos quietos y aceptad vuestra muerte.
Un sello demoníaco apareció bajo los pies de cada uno de ellos, repleto de energía demoníaca lista para explotar.
—¡Escudaos! —rugió el guerrero recién llegado.
Aiden levantó una zona antimagia que los rodeó por completo, incluso por abajo, pero no fue suficiente para bloquear el ataque. Las runas estallaron, destrozando el escudo y derribándolos junto a grandes trozos de roca que se alzaron sobre el pueblo y empezaron a arder con energías viles.
Las rocas cayeron una por una sobre ellos mientras orbitaban sobre su maestro. Luego se alzaban de nuevo y esperaban su turno para volver a atacar.
—¡Maldita sea, no podemos acercarnos mientras tenga ese manto de llamas! —gritó Rholphy.
Thantos echó un vistazo rápido al remolino y a las rocas sobre él.
Creó varias espadas cristalinas y las lanzó contra las rocas, quedándo firmemente clavadas en ellas.
—¡Lonvar!
Al druida no le hizo falta más para entender. Entró en forma de gato y se abalanzó contra una de las rocas que caían para coger impulso. Con pasmosa habilidad saltó de arma en arma, de roca en roca, hasta situarse por encima del brujo. Se dejó caer, cambiando a forma de oso en el aire, e impactó contra él con la fuerza de un misil.
Mirthus rugió de ira y se llevó las manos a la espalda, intentando alcanzar al animal que le estaba destrozando el lomo. El tornado se disipó.
—Tenemos que inmovilizarlo. Cuanto más dure el canalizado más débil se hará.
Mantovil se deshizo de Lonvar con un puñetazo envilecido, que lanzó al oso contra la pared de la herreria, pero dió un respingo cuando se dio cuenta de que el resto se había lanzado a por el.
Creó un pilar de llamas, pero Argent se situó sobre él taponándolo con un escudo divino que sirvió a Athor de trampolín. Ruina se clavó sin miramientos en el hombro del brujo, que lanzó un bufido antes de agarrar una pierna del guerrero y lanzarlo contra el suelo.
Clavó sus garras igneas en la esfera de luz que protegía al Sin’dorei, desgarrando mientras lanzaba chispas de magia salvaje, pero una andanada de proyectiles arcanos le golpeó en la cabeza antes de alcanzar la cabeza de paladín.
—Insectos entrometidos —rugió al lanzar una ola de sombra y llama contra los hechiceros, obligándolos a recular.
Do’urden aprovechó la distracción y le golpeó en el vientre con una Descarga de Sombras. Mantovil se teletransportó varios pasos más allá para recuperar la ventaja, pero una Atracción letal le dejó justó donde había empezado, incapaz de esquivar la Sentencia de ejecución que le explotó en toda la cara.
Lanzó un estallido de vacío vil a su alrededor, empujándolos a todos, y alzó las manos formando un gran orbe de llamas viles. Arqueó el cuerpo para lanzarlo y acabar con la batalla, pero el escudo de Felix voló hacia el orbe y lo empujó hacia atrás, a donde suele asentarse la Feria de la Luna negra.
La explosión sacudió todo el pueblo y los árboles cercanos, iluminando el bosque como un segundo Sol Vil.
—¡¿Cómo te atreves a interrumpir mi…?! —empezó a gritar con indignación, pero de nuevo el escudo volador silbó en el aire y le golpeó en la boca, rompiéndole un par de dientes que se transformaron en colmillos.
Felix golpeó con su escudo, pero una garra ígnea lo bloqueó y empezó a enegrecer el metal en contacto con sus dedos. El bravo paladín era firme como una roca, pero sus botas empezaban a hundirse en el matrecho suelo.
De golpe el brujo cedió y se llevó las manos a la cara. Una certera flecha le había atravesado un ojo.
—OS MATARÉ A TODOS. A TODOS.
La devastación vil que vino después los pilló desprevenidos. Los cielos empezaron a arder y el fuego llovia desde el como proyectiles explosivos.
—¡Atras! —ordenó Athor con el tono de alguien acostumbrado a ser obedecido.
La lluvia se volvió más intensa y más dificil de aguantar. A pesar de los diestros sanadores y sus fuertes escudos, el daño empezaba a ser demasiado para ser aguantado.
La flecha de Hae cayó al suelo hecha carbón. El ojo que había perforado ahora ardía con al furia de su amo, como si fuera el del mismísimo Illidan.
—¡Necios! Apenas habeis arañado la superficie. Cuando acabe con todo esto, tomaré esa maldita gema y devoraré todas las almas de su interior. ¡No habrá nada que pueda oponerse a Mirthus…!
Tink, tink, tink
El brujo miró hacia abajo, hacia sus pies. Un pequeño cilindro de metal había aparecido de golpe, lanzando el mismo ruido mecánico que un reloj. Luego sonó una estridente alarma. Y luego la luz lo cegó.
La granada cegadora de Morda le pilló desprevenido. Dio un paso atrás, incapaz de mantener el hechio de devastación más tiempo.
Athor prendió fuego a su espada y miró a Thantos.
—Si haces los honores, Hojagélida.
Thantos congeló sus espadas y las golpeó contra Ruina. Hielo y fuego rugieron sobre el metal, intentándo imponerse sobre el otro con un resultado catastrófico.
Una onda de choque de priofrío se extendió hacia delante, golpeando al brujo y haciéndole perder el equilibro.
—¡Es nuestra oportunidad!
De nuevo corrieron hacia él mientras intentaba levantarse. Athor se coló tras el y le seccionó la corva izquierda, haciéndolo arrodillarse, y clavó su demoníaca pierna al suelo con Ruina.
Raices manaron de la tierra y se enredaron en su brazo izquierda, mientras el resto utilizó la Luz o su propia fuerza para terminar de inmovilizarlo.
Thantos se puso tras el y le clavó las espadas en el nacimiento de sus alas, haciendo igual que cuando luchó contra el annihilan. Dió un tirón a las cadenas, obligando al brujo a arquear la espalda y sacar pecho.
Justo frente a Belter.
—¡Por el amor de Elune, dispara! —dijo Menel con una mezcla de nerviosismo y esperanza.
Ella dudó por un momento, pero los ánimos le dieron alas y lanzó el hechizo.
El relampago le golpeó de lleno y el gritó de dolor. Las energías viles empezaron a deslizarse hacia el voraz amuleto de Belter, abandonado su cuerpo a gran velocidad.
Pudo notar como su poder disminuía, como sus cuernos sufrian una regresión y como perdía tamaño. Pero no iba a aceptar la derrota, no hasta vengarse de aquellos que lo agraviaron.
—Ahora vais a ver lo que son mil almas de demonios almacenadas en mi cuerpo.
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