Tanto como genial… más bien chapucero.
Eilyria cariño…cuantas veces has dicho que Sylvanas nos salvará y que tienes que seguir a la loca…
Otra cosa es tu prima…me entiende más…
PD además cuento con tus gujas para darle pasaporte a la altonato,luego me puedes matar a mi,con la condición de que te hagas responsable de tu ahijada,y su hermano.
Ah, vale, que te referías a Sylvanas. Yo pensaba en la loca de pelo verde.
Esto si no me descubre antes, porque me he metido sola en un pequeño aprieto.
La que has liao
Ándate con ojo, que éstas kal’dorei son peligrosas y tienen muy mala baba
Menel se desperezó despacio,sintió la ausencia a su lado.Siempre le pasaba igual,tras pasar una noche con él,la cama siempre se le hacía grande.
Se levantó,se peinó y se dijo que necesitaba un café y alguna forma de distraerse o empezaría a pensar en lo mucho que lo echaba de menos y se echaría a llorar.
Tenía la sospecha de que si ella estaba triste sus bebés lo sentirían y no quería eso.
Al salir a la taberna Ahzura estaba allí.
-Poco has dorrmido queerrida-dijo la draenei mientras ella se sentaba a su lado.
-Bueno ya sabes que no soy muy dormilona y hoy en especial…menos.
-Te entiendo,es raro que pase una noche lejos de mi Romuul,pero cuando el deberr me llama y debo hacerrlo no duerrmo bien.
-Ahzu no es muy…mayor para ti?o sea…no me entiendas ,mal…pero…
-Lo es,perro verrás,como bien sabes he conocido a muchos hombrres a lo larrgo de mi vida,los drraenei jóvenes pueden serr muy…intensos y un poco descerebrrados.Quizás la excepción erra mi querrido Kameda,perro nunca me vio mas allá que cómo amiga,estaba enamorrado de una kaldorrei,algo teneis-dijo suspirando.
-Pensé que mi destino erra la soledad,como tú,sin embarrgo conocí a Romuul,tiene la potencia de un draenei joven y la sabidurría de alguien como Velen,al principio no lo vi más que como el Gran Arrtificierro,sin embargo cada vez que le pedía una baliza en Arrgus él erra especialmente atento.Como sabes,yo no nací en Arrgus,cuando vi el mundo natal de mi raza arder en fuego vil simplemente me derrumbé.Supongo que entiendes a que me refiero.
-Teldrassil…lo se Ahzu-dijo Nel con infinita tristeza.
-Aguanté lo que pude durrante días,el dolorr,el horrorr,sin embargo cuando llegué a McAree y vi el antiguo esplendor de los eredar…volví al Vindicaar llorando de rabia,de impotencia por lo que perrdimos por el ansia de poder de Killjaeden y Archimonde,me escondí en la sala de máquinas y allí estaba mi Romuul. Me abrazó con fuerrza y sin tenerr que contarrle que me pasaba me dijo:
-Erramos una raza fuerrte preciosa,perro aun sin Arrgus lo seguimos siendo,y me besó.Y no he vuelto a separarrme de él.Puedo pasarr horras escuchando sus historrias sobre Arrgus,bajar con él a arreglar cualquierr cosa en el Vindicaar,me encantan los hombres que trabajan con sus manos y con el cerrebro.
Menel pensó que Romuul y Argent tenían varias cosas en común.
-Perro yo podrría pensar lo mismo perro en sentido contrarrio.Tu sindorrei no es demasiado joven parra tí?
Menel soltó una enorme carcajada.
-Creo que debo tener como cinco veces su edad si no más-dijo la sacerdotisa.Sin embargo aunque ambos somos elfos,nuestras razas tienen una esperanza de vida totalmente distinta.Creo recordar que el Rey Anasterian con 3500 años fue una rareza entre los sindorei por su longevidad.Nunca le he preguntado a Argent su edad,digamos que si pasásemos nuestras edades con la longevidad de nuestras razas a edad humana sería mayor que yo.
-Entiendo…-dijo Ahzura intentando hacer cálculos.
-De todas formas,tienes razón,he hecho una pregunta estúpida.A estas alturas yo misma debería admitir que cuando se trata de amor,no hay raza,ni edad,ni sex0…solo sentimientos-concluyó Menelwie.
-Ah porrr cierrto querrida-dijo la draenei cambiando de tema viendo que la elfa empezaba a entristecerse,Velen ha sabido del ataque del cazadorr de demonios,la segurridad en el Exodarr se está reforzando con protecciones mágicas y más guarrdias,el profeta pretende hacerr de la nave una forrtaleza.Ha tenido una visión más,tus bebés son imporrrtantes,mucho.El propio Anduin le ha dicho que te establezca como priorridad.
-Genial-dijo Nel pensando en alto-no voy a poder salir de aquí no?
-Va a costarr que vuelvas a verr a tu sindorrei en mucho tiempo,perro algo se nos ocurrirrá.Se que lo extrañas pero debes ser consecuente con tu embarrazo.No llevas unos niños cualquierra ahí dentro,tendrás que hacerr un gran sacrificio.
Mala baba no, malísima
Hême se materializó en Orgrimmar, en la taberna Colmillo Partido.
Estuvo dando vueltas por el Valle de la Fuerza, observando cómo la gente abría sus regalos de Navidad.
A un no-muerto le habían regalado una antorcha con decorados de metal, a un tauren le habían regalado una pala para que siguiera cultivando sus verduras, a una sin’dorei un kit de maquillaje nuevo, a un orco un hacha nueva y bien afilada, y a un pandaren le habían regalado un juego de utensilios de cocina. Un shal’dorei había recibido como regalo una caja llena de botellas de vino de arco, y un trol un fetiche nuevo. Todos estaban muy felices, incluso el no-muerto. Hême también estaba contento.
Una hechicera shal’dorei invocó una nevada sobre el árbol, que se cubrió de nieve de arriba a abajo.
Al ver la nieve, Hême recordó el lugar al que fue a tomar alcohol por primera vez tras su liberación de la Cámara de las Celadoras: Cuna de Invierno, concretamente a la aldea goblin Vista Eterna.
Esos bueno recuerdos lo invadieron, y decidió pasar por allí a tomar unas copas y, por qué no, a meterse en una pelea de taberna.
Invocó a su zorro volador y alzó el vuelo. Se lo había comprado hacía poco a un comerciante, que se lo había vendido a un precio ligeramente alto, pero asequible.
Cuando llegó a Cuna de Invierno, una cabaña distante se encontraba en el llano.
Se acercó, a ver si algún Alianza solitario estaba por allí, para poder matarlo.
La puerta estaba abierta, cosa sorprendente, pero de igual manera entró. Tenía signos de estar habitada, cosa que le convenía recordar si algún día estaba aburrido.
Registró la casa, pero no encontró nada interesante salvo un sótano vacío que le podía servir como sala de tortura. De igual manera, aquella casa era muy kaldorei para su gusto, por lo que se fue de allí.
Llegó a Vista Eterna en pocos minutos, y entró en la taberna.
En la barra había una goblin que no recordaba, aunque es cierto que no recordaba nada de aquella noche…
La goblin tenía un aspecto triste, supuso que algo malo le había pasado recientemente.
Se sentó en un taburete y pidió tres jarras de litro. Siempre pedía el mismo número para empezar, en honor a sus padres y a su hermano favorito, Karyesus.
La goblin lo miró con antipatía.
-Tres litros para empezar? Eso no es demasiado?-le dijo con el habitual tono irritante de los goblin.
-Cierra la boca y sirve, tabernera, si quieres que te pague.- le dijo el Illidari cortante.
Iba a replicarle, pero Hême la miró a los ojos y ella asintió y comenzó a preparar las cervezas.
Normalmente no pagaba lo que se bebía, pero hoy se sentía generoso y estaba dispuesto a pagar.
Unos minutos más tarde ya iba por la catorceava jarra, y al apurarla le dijo a la goblin.
-¿Cuál es tu nombre?
-Vizzie, para servirle
-Bien, Vizzie, ¿cuánto he de pagar?
-Serán 60 monedas de oro, por favor- le dijo Vizzie con tono inocente pero un brillo malicioso en los ojos.
Con un rápido movimiento, Hême sacó sus gujas y seccionó una de las orejas de la goblin, que soltó un grito agónico mientras se agarraba la media oreja que le quedaba.
-No te atrevas a timarme, rata verde. Soy uno de los más conocidos consumidores de cerveza de Azeroth, sé perfectamente que una jarra cuesta dos oros, no cuatro.- la amenazó el cazador de demonios.
Al ver el ataque y la amenaza, la única cliente que había a parte de él, una elfa de la noche bastante borracha, le gritó.
-¡Oye! Tú, maldito monstruo, deja a Vizzie en paz o…
Sin siquiera girarse, Hême lanzó una de sus gujas hacia atrás y cercenó limpiamente la cabeza de la kaldorei, interrumpiéndola.
La goblin gritó aterrada y Hême le dijo:
-Como compensación por el intento de robo, te llevaré como esclava para que pelees contra gnomos y ganes un buen dinero para mí.
-Jamás! Prefiero la muerte- lo desafió.
-Sea, pues- dijo Hême.
Haciendo gala de una fuerza y agilidad sobrehumanas, agarró a la goblin, le arrancó los brazos y le cortó la cabeza.
Se comió su cuerpo, y el de la kaldorei, en forma de demonio.
La cabeza de Vizzie la metió en una cacerola y la tapó con un trapo, para que alguien se llevara una sorpresa.
Cogió la cabeza de la kaldorei y alzó el vuelo hasta la cabaña de la nieve.
Como tenía arquitectura kaldorei, supuso que un miembro de tal raza vivía allí.
Pensó que sería divertido ver la cabeza de una hermana en tu casa, por lo que puso la cabeza chorrearte sobre la cama.
A modo de marca, pintó el símbolo de su familia, que despertaba temor y respeto entre su pueblo, en la pared usando la sangre de la elfa.
Era una representación de Belore rodeado por un aura roja y con doce gotas del mismo color alrededor.
Para asegurarse de que siguiera allí un tiempo, lanzó un hechizo sobre el dibujo que le confería invulnerabilidad durante tres meses exactamente.
Salió de la casa y volvió a Orgrimmar volando.
OFF: perdonad el retraso pero llego ahora de la “comida”
OFF2: Heme, en serio. Para, de verdad. Creo que no terminas de pillar lo que estamos haciendo aquí. Lo único que te falta por escribir es que te miras al espejo, no te gusta lo que ves y te cortas el cuello y te comes a ti mismo. Y con todo el cariño del mundo, si no te ves capaz de escribir como nosotros (que escribes muy bien) no sigas.
Eleanna asintió ante la petición de la general. Se acercó al escritorio, cogió una hoja de papel, pidió permiso a la general, que le respondió asintiendo con la cabeza. Eleanna cogió una pluma, y comenzó a dibujar un círculo junto a unas runas. Lo colocó en el escritorio, puso su mano sobre el dibujo y se concentró…
La mano comenzó a emitir un destello, que iluminó fugazmente parte del escritorio. A los pocos segundos, el destello desapareció. Eleanna cogió el papel, lo arrugó formando una bola con la hoja, y lo quemó de un fogonazo en su mano. Se giró hacia la general mientras tiraba las cenizas en una papelera y le dijo:
“General…está en el Exodar. Tengo sospechas de que haya solicitado… como decirlo… “asilo” a los draenei. Como conoceis de primera mano Velen y nuestra suma sacerdotisa no es que se lleven bien precisamente. Esto puede ser… problemático.”
Eleanna agachó la cabeza: “Te pido disculpas Shandris, hace un par de días ya la localicé en el Exodar y pretendía comunicartelo… pero me ha sido imposible… lo siento…”
Antes de que la general respondiera, Eleanna, levantó la cabeza y dijo mirándola a los ojos:
“Shandris… no sé cuanto tiempo tardará la sacerdotisa en descubrir mi… truco. Pero puede que lo haga y no seamos capaces ni de localizarla ni de… abrir un portal justo al lugar donde se encuentre. Te pido que recapacites si… debemos usarlo o no.”
Y Eleanna aguardó la respuesta de Shandris…
Oh, está bien Eleanna.
Como ya le dije a Eilyria, toda ayuda es bien recibida.
Mataré menos personajes desde ahora.
Y gracias por decirme que escribo bien , hacía mucho que no lo hacía
Si no es matar o no matar. Es que no tiene sentido que mates y te comas a todo dios. Creo que llevas varios miles de mensajes leyéndonos y otros te han explicado lo que intentamos ofrecer.
Una historia con risas, intrigas, amores, ha habido guerra si, pero actos deliberados sin justificar?
No sé tu, pero a nadie le da gusto leer constantemente, “lo maté y me lo comí”… ¿Y por qué?
Y mi héroe es super poderoso y ante todo tiene respuesta.
Yo tenía dos personajes, una murió degollada por un pícaro random y la otra se suicidó. Aquí no somos adalides, somos mindundis. Cosas salen bien cosas salen mal, es la gracia, pero siempre intentando mantener un relato agradable.
Creo que entiendes lo que te quiero decir. Y en serio y con todo el cariño. Si no lo entiendes… (y que no suene brusco) no sigas escribiendo, lo cual sería una pena.
Sí, lo entiendo.
Gracias por vuestra ayuda, intentaré hacerlo lo mejor que pueda y si no puedo me limitaré a leeros, que es una auténtica gozada porque escribís muy bien
Me alegro de verdad, y por eso te suplico que te ciñas al marco que estamos estableciendo, por favor.
-En El Exodar… No será necesario Eleanna, tengo una idea. Debo irme a prisa, Ishnu-alah Capitana.
La maga la miró extrañada y se despidió.
Shandris caminó hacia el mercado de los Vientos Aliseos “ Tengo que hacer una visita a un gnomo…”
Off:
-Ha sido cortito pero ya para dejarte libre Ele, antes de irme a dormir
-Me sabe mal Hême pero Ele tiene razón, escribes súper bien pero quizá podrías intentar entrar en la trama e interactuar con nuestros pjs, pero con tranquilidad, piensa que cuanto antes los mates antes se acaba . Pd: que guay que te hayas pillado el compañero vulpino, yo estoy entre el dragón hada encantado y el buscarstelar luminoso
Si, lo sé Aly.
Pero me lo estoy tomando con tranquilidad para evitar hacer metarol y aparecer de repente enfrente de Argent por la cara…
El zorro está muy chulo, y yo de entre esos dos elegiría al buscaestelar, pero ya es cuestión de gustos. El dragón me parece demasiado… cargado.
Hême llegó a a Orgrimmar bastante cansado.
Le pagó a la posadera del Valle del Honor y se tumbó en la cama.
Tras pensar durante un buen rato en la situación con Argentsword, llegó a la conclusión de que quizá su traición no era tan grave. Al fin y al cabo, no tenía pruebas de que le hubiera estado pasando información confidencial al enemigo, y lo único que era seguro era que se había enamorado de una kaldorei y en una de sus citas había quedado embarazada.
Después se dio cuenta de las majaderías que estaban cobrando forma en su mente y pensó:
-Bah! Seguro que pienso estas tonterías por culpa del alcohol…
Se dio la vuelta y se quedó dormido.
A la mañana siguiente se sentía mejor, ya no estaba tan cansado. Desplegó sus alas e hizo una casi imperceptible mueca de molestia. La juntura de las alas con su espalda seguía contraída por haber estado tanto tiempo volando la otra noche.
Ignoró la molestia y salió de la posada. Tras agradecer a la posadera el alojamiento, invocó a su murciélago, y se dirigió volando al Circo de las Sombras.
Quería ir a Arathi a vigilar para que la Alianza no intentara nada, así que fue hacia el portal de Dazar’alor.
Justo antes de cruzarlo un largo látigo se enrolló en su antebrazo izquierdo y tiró de él.
Una súcubo lo cogió por la cintura y le susurró con voz suave y tentadora:
-Mi maestro te busca…
Acto seguido lo soltó y se fue dando provocativos pasos que atrajeron la atención de varios magos orcos que allí se encontraban.
Sabía que esa súcubo era Mirlissa, la que acompañaba a su hermano.
Karyesus tenía un fuerte vínculo con sus demonios que pocos brujos tenían, pues los apreciaba a todos y ellos a él. Podía sentir la profunda admiración y respeto que los demonios sentían por su hermano gracias a su sangre de demonio.
Karyesus surgió repentinamente de las sombras con unas crías de sable nocturno degolladas colgando de su cinturón. En la mano derecha tenía una daga ceremonial curva y negra, la misma con la que había matado al gnomo hacía unos días.
En la mano izquierda tenía un corazón mordido, que provenía de las entrañas de la madre de las crías, situada en un círculo ritual.
Aquellos sables eran especiales, ya que Elune había bendecido a la madre con una vida longeva y un gran poder.
-Hola hermano- lo saludó Hême- ¿qué tal?
-Muy bien, estoy haciendo un ritual con estos bichos para que Droofum pueda matar a kaldorei con la bendición de Elune fácilmente.-le explicó Karyesus.
-Vale… Bueno, Mirlissa me ha dicho que me buscas- dijo el Illidari.
-Sí. Últimamente estabas preocupado por Rhakez, tu demonio, verdad?- le dijo Karyesus.
-Mucho, llevo mucho tiempo con él y le he cogido cariño. El problema es que antes era muy sanguinario y me hablaba constantemente, pero hace ya tiempo que no lo escucho…- le dijo Hême
-Tengo la solución. Ven, sígueme.
Karyesus se acercó a un orco completamente oculto en las sombras, y el orco le dijo algo en demoníaco <>.Karyesus le respondió, también en demoníaco <<…para quienes dominan los caminos>>
El orco se hizo a un lado y un sendero oculto apareció.
Karyesus cruzó por él y Hême lo siguió.
Al otro lado había un círculo dibujado con sangre de demonio. Tenía una calavera en cada uno de los tres vértices del triángulo que había en su interior.
Eran de tres razas distintas: una calavera de orco, otra de draenei y otra de elfo de sangre.
Hême, siguiendo las indicaciones del brujo, se colocó en el centro y se concentró.
Karyesus comenzó a recitar un conjuro muy antiguo, en una lengua prohibida que ni siquiera su demonio conocía.
Unas formas oscuras comenzaron a danzar a su alrededor, cada vez más cerca.
Cuando lo tocaron, lo envolvieron y él soltó un grito.
Acto seguido, el ritual acabó y el dolor desapareció.
-Ahora, intenta hablar con Rhakez-le dijo Karyesus.
Hême se concentró y al fin escuchó una voz en su interior.
-Rhakez!-pensó Hême
-Maesstro…-respondió el demonio
-Por fin!-le dijo Hême-¿Qué te pasaba?
-No podía hablarle, maestro… Usted… es más sanguinario que yo… No necesita consejo…
-Sí que lo necesito. Últimamente soy menos original que en mis buenos tiempos…
-Está bien… maesstro… le ayudaré en lo que quiera…
Karyesus, que había escuchado la conversación, le habló.
-Me alegro de ver que has recuperado la comunicación con tu demonio.
-Sí,yo también- dijo Hême contento- Bueno, cambio de planes. Me voy a Terrallende.
Que maravilla,llego de trabajar y la cabeza de Vizzie está en una olla,¡ y tengo la cabeza de una de mis hermanas en mi cama de Cuna…menos mal que se supone que no lo se,o te juro por Elune que ibas a pasar de ser el cazador a la presa.
Coincido con Ely y Alyÿ,puedes ser igual de “malote” sin matar a todos dios porque si y comértelo…es que es muy gore.Ya te lo dije cuando mataste a mis padres por los loles.
De todas formas Argent no está en Terrallende.No se ni yo donde está,pero si quieres ir de turismo… te recomiendo las islas flotantes XD (aunque están mejor en buena compañía)
Alyÿ yo tengo el dragón hada,me lo regaló uno de mis mejores amigos y lo adoro
No Menel, si no voy a Terrallende a por Argent. Ya verás a por qué voy.
Pero no hoy, mañana,que ya es tarde…
No si ya…yo es que acabo de llegar de currar y como siempre vengo que parece que voy puesta de red bull XD
Y mañana que libro me han hecho la 3.14 y no se como pero he acabado liada para llevar mañana al cine a ver Aquaman a 3 niños
Elune dame paciencia!!!
Off// La continuación
– Nunca cambiarás, Hæyhæ, ni en la situación más seria.
No lo decía como alago, obviamente. ¿Acaso esa mujer conocía la palabra? Probablemente no, pero aquello formaba parte de su peculiar encanto.
La conversación no se alargó mucho más, y al cabo de un tiempo los dos salían por la puerta del edificio principal. Iban ya a despedirse cuando de repente oyeron un profundo rugido y una gran figura felina salió de entre las sombras abalanzándose sobre el sin’dorei. Vereesa, rápida como un rayo, sacó su arco y apuntó al animal, pero al ver que éste estaba cubriendo a lametazos al cazador en lugar de matarlo fue bajándolo poco a poco, confundida.
– ¡Te he dicho mil veces que no hagas esto!- decía el sin’dorei mientras trataba de librarse inútilmente de los ataques de lengüetazos del felino- ¡gato malo!
– ¿Prrr?- contestó él inocentemente sin quitarse de encima.
Vereesa suspiró mientras se llevaba la mano a la cara ¿Y se supone ese había colaborado para detener a la Legión? ¿Con ese compañero animal que se comportaba como un gatito además?
– Espero que tu amigo no se porte así en cualquier parte.
– Claro que no- contestó Hæyhæ mientras por fin conseguía levantarse- Blackie sabe cuándo hay peligro o no.
El enorme felino comenzó a restregarse como un gato en su amo, casi tirándolo de nuevo al suelo con cada nuevo empujón. No paraba de ronronear.
– ¿Blackie…? -empezó la quel’dorei mirando al animal. No tenía un pelo negro, más bien era color canela- es igual, no me lo cuentes- terminó diciendo con un ademán de la mano- Ya nos veremos, sin’dorei.
– Cuento con ello… querida- contestó guiñándo un ojo.
Y por supuesto la mirada asesina de despedida no podría faltar.
Off// ¡Otro pequeño fragmento marchando!
Jo Hême, tampoco me gusta que vayas por ahí matando a to dios, pero cuando matas felinos, me dan ganas de despellejarte con un pela-patatas y después arrojarte a un cubo de alcohol para que te disuelvas poco a poco
¿Qué? No me miréis así ¡A los gatos no se les toca!